Solía pensar que estaba bien ser un poco infeliz con tal de escribir algo aceptable, publicable. Quiero decir, funciona. Dejé de borrar escritos y de llamarle tristeza, cambiándole el nombre por inspiración - siempre que sintiese, al menos, algo. Por eso prefería, a veces, dejar de sentirme tan sumamente vacío. Pero no me queda claro del todo si está bien eso de escribir algo "bueno" mientras por dentro se está totalmente inestable. Es una ironía. La vida - si es que existe eso - se ríe de nosotros. El sabio es infeliz y el necio no puede estarlo más. Supongo que todo tiene un precio, y yo ahora mismo estoy pagando el de haberte tenido. Un poco menos de lo que quise, pero un poco más de lo que podíamos. De lo que podía.
Tengo que dejar las metáforas.
O más bien, tengo que dejar tu recuerdo.